sábado, 28 de febrero de 2009

Brújula (peregrinación)

Raspando lo que le queda
a este mes en mi calendario
agarraré un puñado de estrellas
y caminaré
para oler la noche en tí
para que duermas los ojos pegados
a tus ideas
y tus alas de ángel
en las nubes que sólo yo he de mirar.

Caminaré por esta noche
sin un itinerario apropiado
estoy segura que me saldrán por todos lados
tus ojos, tu cara,
tu luz de niño bueno
tu voz.

Mejor brújula que tu sonrisa
te juro no tengo:
hago eterno este mes de febrero
gracias por tanta música
gracias por tanta inspiración.

Y que mis besos salten
al mes de tus ojos inquietos
para continuar la peregrinación de amor.

Mis versos

No tengo otra moneda
para pagar tu sonrisa
excepto estas manos agrietadas
por la tierra de este día
y las uñas que retumban
en el teclado de mi poesía.

Mis versos no son nada
sin tu voz
sin tus ojos
sin el tiempo que te gastas
recorriéndole
los pechos, la cintura,
los muslos, los pies, el cabello,
el alma y el corazón
a estos poemas que para tí yo canto
niño mío amado,
gorrión que eleva a trascendental
el tránsito de cada mes.

Me pregunto

Me pregunto si la nostalgia
por el invierno apoquinado
en los rincones de otro lugar
menos en mi Saltillo
será este combate
entre el norte y el sur
por tener la corona del rey viento.

Un aire como del demonio
remolinos hace en mi cabello
la alergia emerge
el sueño sucumbe
el ciprés de alado se mueve
como ser de cemento queriendo.

Es la locura de febrero
las patadas de ahogado
que ya no veremos
febrero se fue
y marzo espera tranquilo
para darle paso
al florecer en este lado del mundo
de nuevas horas
menos tristes
ya sin invierno.

Si existiera algo

Si existiera algo
que me hiciera sentir
la fe que sienten los feligreses
los ciegos del cuerpo y alma
y fanáticos de la religión;

Seguramente serían tus letras
tus palabras o tu boca

(Al menos para mí eso eres
verdad de Dios que no estoy loca);

Seguramente te elegiría
igual de ciega que cuando aquellos días
en que dije sí a tu nombre sin pensarlo
sin saberte ni analizarlo
igual de honesta
como hoy.

No sé por qué habría de seguirte tanto
simplemente sé que creo en tí
en tus manos
en las acciones que diriges con ellas
en el viento que emites hecho canto;

No sé por qué lo haces así
sólo sé que creo en tí
como creo que mi nombre soy yo.
Por ser el último de febrero
el mes en que más veces
he puesto mi mano derecha
sobre la misticidad de tus valientes ojos
reclino mi cabeza entre tantos recuerdos
los que tracé por tí
a pesar de que no estuvieras para verlos.

Intento hallar la manera
de componer el poema más bello
que te haga entender que la fiesta
no son estas letras
si no el amor que sin querer
hiciste que sintiera por tí
dentro muy dentro.

Por ser un sábado con luz parecida a tu sol
pero con el viento helado y lento
veo transcurrir las horas
para entrar en el mes más sagrado:

Amarylis llega,
tu habrás soñado
con que tus pasos ahora se renuevan
en 365 días más.

Por ser el último de febrero
te evoco, te invoco y te pongo mis manos
a grito alzado:
apuesto que podrías
desafiar las leyes de la física
pero nunca
las de mi corazón.

Quién fuera

Quién fuera
cazador de minutos
para mandarte cazar este preciso
donde releo lo que existo
y comprendo
que mi realidad, mi poética
y mi pan
eres tú.

Quién fuera
cazador de luces
para mandarte cazar una
y así competir con la llama que me naces
en medio de mi mar
en medio de mi mar
en medio de este amoroso mar.

Quién fuera
cazador de distancias
para mandarte cazar una
y así aniquilar la que me separa
a momentos de tí.

Quién fuera
cazador de los sábados más bellos
aquellos donde relumbras como el fuego
que eres por las noches
durante este extinto invierno
y en las olas de mi mar
de mi mar
de este entregado y enamorado mar.

Los vecinos de la galaxia siguiente

Otra letra más que te escriba
y me poncharás el corazón
con esta lágrima que circunda mis dedos.

¿Es que acaso eres
un ser del cosmos extranjero
o por qué conmueves mis venas hasta el llanto
cada vez que tu nombre evoco y alcanzo
con este amor de mi verdad?

Otra letra más que te escriba
y esta madrugada de finales de febrero
resultaría en fuegos artificiales
retumbo de besos granada
que sale de mi voz
para tí nada más.

Otra letra más que te escriba
y los vecinos de la galaxia siguiente
a callar mi voz me amablemente pedirán.

El amor en mí
a veces suena como con un altavoz al centro de mi pecho.

Recuérdame mis 26

Recuérdame que vivo en mí
porque te amo y la magia de tu piel
de tu alma y de tu valentía espero;

O porque creo en la posibilidad
de una unión sideral asida de tu cuerpo
tomada de tu mano
y enlazada suavemente a tu corazón.

Recuérdame mis 26 cuando la cara se me marchite
dime que siempre seré estrella
dime que brillo igual esta noche
y en el lejano amanecer.

Recuérdame el estoicismo
con el que esta debutante se entrega
espada sin filo
que corta las cabezas del temor y del odiar;

Recuérdame como en estos días
cuando yo transite otras veredas
paraliza este instante y vuélvelo nuestro
haz una instantánea de mi nombre
mi voz y mi cuerpo;

Y recuérdate a tí mismo
que como a nadie
la mujer que probablemente
ya no reconozcas al espejo
ha amado jamás.

Recuérdame que hoy te amo
recuérdate que así siempre será.

Regresar al Hogar

Al caer esta noche
bajo el aire anticipado del estío
me doy cuenta que realmente
te amo más de lo que yo misma imagino.

Alimentada con las ganas
de ser nube o estrella
para guiar tu sendero hasta mi silo
te escribo con las manos goteando
estas sílabas que exhala
cada poro de mi cuerpo
al dormir y al despertar.

A dónde voy no lo sé
si el timón de mi barca
serán tus brazos o mi ánimo de navegar
sólo sé que esta noche
resistirme no pude
de decirte que has sido mucho
que en mi vida importas tanto
que es imposible dejar a un lado
tanto amor
simplemente porque es hora de despertar.

Amarte así es algo más que desear tu cuerpo
tocar tu pecho
o sentirme segura enredada en tí.

Es querer elevar mi espíritu con el fuego del tuyo
es transmutarme en un planeta etéreo
al tiempo que te transmuto en mi fuego divino
es regresar al Hogar.

Mis dedos pueden escribirte mucho
pero mi alma y mi corazón
te expresan desde aquí
aún más:
las yemas comunican este amor con tu tiempo
y tu espacio serenos
los otros dos inventan la llama
que los humanos bautizamos con la acción de amar.

viernes, 27 de febrero de 2009

El examen

Dentro de una hora con cincuenta
me harán preguntas extrañas
como lo que es varianza y moda
variables y cosas que no le encuentro un
para qué.

Estaría mejor que me preguntaran
más o menos cuántas veces
te pienso al día
cuántos besos lanzo a las nubes
cuando están pachoncitas
cuántos golpes a mi teclado
para escribirte mi amor.

O que me pongan a hacer un promedio
de las veces que te he encontrado
pensando en el mundo que eres tú
las mismas en las que yo me he entregado a tí
como lo hacen los ciegos a su lazarillo
o las veces que he dejado mi falda
en los litorales de los anillos
de mi padre Saturno
con tal de venir hasta donde tu ser
tus mejillas, tu cara de niño.

Que me digan si la campana de Gauss
se da en el punto exacto del mediodía
de la media noche
y de las medias tintas
con las que lágrimas y mariposas revoloteando
he abierto la boca alto muy alto
para ver si así me escuchas
para ver si así sientes
lo que vale en mí tu sol.

Estoy segura que me sacaría cien
si me preguntaran cómo se veía la luz
cuando me sonreías
aquellas tres lunas en las que te apareciste
y que tomé como píldoras
para mantenerme a flote
para ver si una cuarta se realiza
o para ver si puedo jugar a dios y recrearte
en el libro que tengo a medias escribiendo
y que te lo debo a tí, mi amor.

Que sea con estilo

Si ya sabes que te amo
¿para qué tantas letras?
Más valdría volverme huracán
hipnótica saeta
la falda que dance hasta tu mirada
atrapar.

O mejor un lanzamiento de bala
usando este corazón en almíbar
yo lo lanzo, tú lo cachas
lo que hagas después
es una historia que ya no es
completamente mía.

Porque si ahora escribo con mi corazón
cuando sea tuyo,
tal vez no quiera regresar a mis dedos jamás.

Exprímelo
arráncamelo
sacúdelo
sálvalo;

Y si lo dejas morir,
que sea con estilo,
haz que valga la pena
el sacrificio de mis cortos años
dar la cara a tu cara
y decir que te amo
no se hace todos los días
porque no todos los días
una mujer como yo se enamora;
el amor en mí jamás será desechable
como el agua de uso corriente
como la pasta que escupes al lavarte los dientes
como un jabón que te purifica el día a la mitad.

Si ya sabes que te amo,
¿para qué tantas letras?
Olvidé decirte que soy hedonista
en cuanto al placer que me da
escribirte estas letras.

Olvidé decirte que esta es mi vida
antes que mujer, soy poeta.

Y te amo, vaya que así es...

El holograma colectivo (la venganza de la diosa yo)

Yo no coincidí en tí
por gusto
la miopía vale en mí
hasta en mis gustos madrugales
en mis amores selectivos
en mis expresiones entintados
por el bermejo de mis olas sensuales
dí a tí por las parábolas
que dibuja alguien más para entretenerse
porque quería que escribiera versos sin verte
porque quiso darse el gusto
de verme enamorada de tí y nada más.

Pero que un día me vengo y lo hago coincidir
con una historia de amor tan grande
como la que vivo en mi propio mundo
para que vea lo que es unir a dos mundos
bajo el mismo techo
para que sienta lo que yo siento
cuando te siento al despertar
y ver que estuviste la noche entera en mí
y ahora debo en el holograma colectivo caminar...

Con sus cinco letras

Si los patos del lago de la deportiva hablaran
te hablarían de las nubes que han pasado desde mucho
desde el entonces en el que yo
desde el momento en el que palpité
desde el instante en el que con fuerza
desde el minuto en el que decididamente y entregada
desde la gloria separada del mundo en el que mi corazón.

Las palabras son exactas para decir lo justo
lo preciso, lo realmente sentido
valga este Garamond de 12 en malva
para decirte que a pesar de las vitrinas
de los cuentos largos, de las avenidas,
de esta historia extraña, de lo que siento es amor
y tú creerás una fantasía
te amo.

Con sus cinco letras refulgentes gravadas en relieve
bañadas en platino de mi propio universo agridulce
y violáceo.

Y sin patos.

Un dos tres por mí

Un dos tres por mí
y por todos los besos
que llevo detrás
enfrente, a los costados
entreverados
y conmigo misma:

Pido a este dios que nos juntó las caras
que me hizo el milagro
de conocer tu sonrisa
que este día me recuerdes
y te sientes un rato
a ver las olas
por este amplio y enamorado mar
que soy.

De dulzura amor IV: Navegar

Y al llegar al cenit de su frente
al universo propio
que es ese núcleo frontal
ella dispara un beso desde su vientre
luego le toma la mano
y dentro de su mar de amor
le invita a navegar.

Después fragmenta en cuatro
su nombre
y los esparce por el espacio
para que los dioses menores
la dicha puedan gozar
sus pupilas se vuelven majestuosas
sus labios destilan ofrendas de flores
y en una lengua serena
su amor le da de beber en una jicarita
para que el mismo dialecto
su hombre le hable
para que así el bipersonal baile
pueda comenzar.

De lo demás que ocurre
la historia habrá que preguntársela
a las estrellas
todas son hijas de este amor que ella le profesa
todas son un puente para llegar
al punto exacto que media
entre la realidad triste y la armonía
donde ella es ella
se vuelve única porque lo ama
y única le mira él
porque es verdad.

De dulzura amor III: La entrega

Al no existir ya las distancias
los minuteros claudican
antes de saltar al vacío
que ahora está lleno
de este hinchado corazón.

Luego, la piel se despoja
de todo cuerpo con volumen
se desliza suave sobre la marea alta
que a estas alturas
esa, la de los cabellos otrora rojos
es sin que ella lo sepa
porque se entrega a la mirada
de su hombre imperfecto
de ese ser que le roba la paz para devolvérsela
un manojo de tiernos y como de fuego silencios
con la premeditación que dispone
al desplegar las alas que no es en el día
porque debe morder y rugir allá afuera
como lo hacen los demás.

En la hipnosis del encuentro está ella
la música que no canta al mediodía
porque se guarda completa para quien la incita
a ser cítara y laúd, sonata orquestal:
sus párpados la delatan
sus comisuras se le ensanchan
como la voluptuosidad que vive en el sueño
como la entrega que le hace a su dueño
en una paralela realidad.

En la entrega sólo hay de dos sentidos:
el erótico y el místico
ella vence titanes y se escurre entre los orificios
de las paredes que no son reales
con tal de lograr la venia de los dioses
para darle a su hombre ambos por igual.

De dulzura amor II: Contraposición holofrástica

Y ahora que estás en mi mente,
amor de piel de niño
mi guerrero de la paz valiente,
proyecto tu silueta
en la pared de mis anhelos
y la dejo ahí por largo rato
y en silencio;

Hasta que tu ternura por mi garganta
baje
hasta que las lágrimas
se vuelvan mi comida, mi vino y mi sal.

Pongo las palmas de mis manos hacia arriba
procuro sentir tu vibra de hombre creyente
en la posibilidad de la abstracción
de los males del planeta
o en la decisión de brincar al vacío
ganchado de los que te seguimos
porque la idea no está tan mal;

Arriba, las estrellas sobre el manto índigo
en el centro, el seno de esta mujer que te sabe
te espera y te ama
especie de pararayos enamorada
recrea la paz de tus ojos.

Luego llora por la existencia
de los milagros
que sólo ha podido reconocer
en tu blanca faz.

De dulzura amor

Una lámpara
que no se extingue con nada
así le soples fango o lluvia
luna o sol.

Así es esto que me palpita
de los pies a la cabeza
y más al centro de mis dos volcanes
cuando disecciono tus sílabas
y las deslizo por mi sangre
o cuando las figuras de mis manteles
me recuerdan tu voz
o cuando un niño en la calle me sonríe
y recuerdo que compartes con ellos
la ternura que aprecia mi propio dios.

No quiero ser trillada
apelar a los lugares comunes
la poesía de esta voz de mujer niña
que te llama al dormir
al soñar contigo
al despertar.

Pero no encuentro otra manera de decirlo:
retumbas en mí
y yo soy esa lamparita
debe ser porque tus dedos así me lo indican
debe ser porque en mí naces
la frase de dulzura amor.

jueves, 26 de febrero de 2009

A contraluz

A contraluz tu cuerpo
deberá verse como este papel
en el que escribo la planicie de mis versos
porque las palabras no existen
para describir la magnitud
de este querer.

Y sin embargo,
te escribo amor.

A eso de las cuatro

A eso de las cuatro
arrullo en los treinta grados
ese beso que espero
emerja de tus labios.

Hijo de Neptuno,
yo imploro a tu padre
que un día de estos
navegues por este mar de luz
el mar de besos
que por amor a tu nombre
mi sangre convertí en eso
el día que decidí
prestarle oídos a mi corazón.

A eso de las cuatro
arrullo en los treinta grados
ese beso que espero
emerja de tus neptunianos labios...

Tambor a cuatro tiempos

Como un tambor a cuatro tiempos
así oigo este corazón
en este jueves en donde no comprendo
por qué he de hacer una tormenta
en un vaso de agua dulce
si por esos ojos, tus ojos,
me he vuelto un maremoto de amor.

Recojo mis penas
ya me doy una idea de conjunto
mientras exista la posibilidad de latirme
cuando escuche tu nombre
y de ver cómo mi cuerpo enjuto
apenas tus labios rozan mi piel
cuando los árboles se mueven
por el efecto del viento que eres desde
ese ombligo urbano lunar;

Y me doy cuenta que arrastro la cobija
los pies, la voluntad y la mocha pudicia
y me vuelvo cohete de besos
mujer volcán.

La servilleta

Miro este medio día
y extiendo una servilleta en mis rodillas
me preparo para regresar a mi infancia
a comer los sandwiches de la mamá
con café con leche disfrazado de jugo de naranja.

Luego volteo, la miro a ella
los años nos han dado la vuelta
ella sigue como la flor que era
al girar sobre su eje cuando se le acababan los treinta
se queja del dolor de espalda
temo que la pesadilla vuelva
y yo me miro tan dulcemente violenta
una oda a la rebelión pacifista
una mujer vestida en traje de los anti treinta:

Juro que este día lo absorbo en mis mejillas
juro que hoy le hago una fiesta a mis caderas.

Despojo del avión

Las aves también son flojas
anoche espanté a un pájaro avión
que usurpaba el nido
de mis cagonas golondrinas.

Lo hice porque soy fiel a la causa
de ver sus polluelos
a mitad de mayo
y llorar cuando al partir me visitan.

Le sugerí al pájaro
que el muy desgraciado no volviera
o que si prefería, le regalaba el naranjo
para que platique con la tórtola
que a las ocho de la mañana
con sus quejumbres
me despierta.

Luego medité
que quizá los humanos
no tengamos la culpa de ser como somos:
si los animales usurpan lo de los otros
y nosotros con nuestras acciones
menos que animales somos
entonces,
¿para qué mortificarse corrigiendo caminos
si el oráculo de hombre es ser mendigo
de la divinidad
aunque tenga todo para ser dios?

Eso lo pensé a las diez de la noche
de anoche
ahora simplemente borro toda discusión
y me preparo para profesar mi religión:
el cambio.

Quise ser anarquista

Quise ser anarquista
hasta que me detuvo tu boca
y me paralizaron tus ojos
llevándome como se lleva a los esclavos
a someterme a las leyes
del tiempo
el espacio
de tus anhelos, de tus ganas, de tus deseos
de tus pensamientos
la aburrida lógica
la innecesaria razón...

Me quedé por una sóla ley
que realmente valía la pena
si por ella conocí tu figura
encapsulada en esa piel de arena:
la ley del corazón.

Quise ser anarquista
hasta que te tuve frente a mi cuerpo
desbarataste mis planes
echaste a perder mi amargado destino
y todo porque cupido mató
mi ascetismo romántico.

Quise ser libre
como la chiva loca que he sido
desde hace veintitantos
en mi prisión de soledad...

Hasta que llegó tu mirada
y me sometí a la bendición
de tus cinco minutos
en mi transitar.

Quise ser anarquista
y tiré la bandera y la ideología
por seguir tus ojos
por darte este corazón que navega
en este mar.

Quise ser anarquista...

Café con Prometeo

Atiendo al aire
que entra por mis ojos
agarro un puño de tierra
y la someto a la humedad de mi boca.

Esperaba la llegada
de esta noche
mensualidad que alterna mis extravíos
equilibrio que desarma mis desvaríos
suelo seco que impone su cruz
tras los cristales del retrovisor.

Me narro a mí misma
los factores, los axiomas, los sofismas
que delinean mi cara, mi vientre
ese túnel por el que navegan silentes
los afiches de la libertad de mis quince
que afortunadamente no volveré a tener.

Naranjas índigos que ruedan en esta bóveda
magentas en el ocaso de un día
en el que respiras por completar la cuota:
todo es tan perfecto que denota
que a la imperfección juego
porque no quiero desaparecer.

Si me vuelvo perfecta termina el viaje
el silencio se vuelve la respuesta
y la realidad se disuelve en el aire
y por cada cantera que mi cuerpo cante
habrá un guijarro que me sorprenda
con que el hoy ya en realidad es ayer.

De ahí que por cada noción del tiempo
las horas se vayan caminando a sus anchas
no trasciendo porque no entiendo
a quién debo darle el ejemplo
por qué debería yo ecuánime permanecer.

Ya luego me castigo diciendo
que este mundo es para los conejos
saltan y se hacen agujeros donde meter
la cabeza cuando cunda el miedo
se reproducen a mil por hora
y sólo piensan en volverlo a hacer
y no para mí.

La perfección quisiera hallar
si los demás también la buscaran.

No tengo el hilo negro
de las razones por las que el ser humano
agobiado sin sentido se mata
entregándose a la incertidumbre de los designios
de los dioses que ahora
engrosan las filas del insen.

Tengo dos piedras negras que miran
las manos con las que escribo
los días de mi vida
el cuerpo que no está aquí
pero que persiste en la memoria colectiva
una entidad carbónica con nombre de mujer
un librito de filosofía hindú
otro de mantras por si el ocio me hostiga
un calendario, una agenda que desde hace tiempo
ya no respira
y las líneas de mis manos
que me llevan a tientas por el camino que llevo trazado
porque en estos días la reflexión
es parte de lo que para otros no funciona
pero que para el pensador
es el equiparable a volar sin pies.

Hace rato
me tomé un café
con Prometeo
creo que juntos haremos
una asociación universal
de rebeldes sin materialistas sueños
en donde la libertad de ser sea lo primero
y después la autocensura vendrá.

Confucio estaría agradecido
con la disposición a reconocer
que en este vacío sólo habemos moléculas
pero que ninguna tiene cara de verdad.

miércoles, 25 de febrero de 2009

Me columpio en la tarde azul

Me columpio en la tarde azul
que imagino son tus brazos.

Así debilito mi incredulidad
ante las distancias y los huecos
que en la panza dejan los espacios
y los lleno de la vitalidad que creo
con lo poquito que tengo de fe en el mundo
-la misma que nació al verte
porque fue un milagro saber la vida bella
en tus ojos-
de la esperanza de verte
de darte por entero este poema mundo
que es mi cuerpo
mi sangre, mi mente y mi corazón.

Afuera hay un nido de cafres

Afuera hay
un nido de cafres
llegué de purito milagro
con el cuello torcido y cansado
de prenderme del volante.

Una nave de propulsión de colores
estaría bien que tuviera
me ahorraría los calorones
y no lloraría porque pienso
que nadie me ve
porque todos los conductores
al frente mantienen la mirada
esperando a que la luz verde
el deseo de presionar el acelerador
les conceda.

Qué cosa es la ciudad ahora
tan llena de gente
tan esquizofrénica
tan como de topos
tan sin tu voz.

Si como nubes y vuelo los árboles...

Si como nubes y vuelo los árboles
¿qué más se puede perder
excepto las alas imaginarias que me sostienen?

Aquí la luna enclava lo más profundo
de mi corazón
no existe cura
no hay palabras
para describir tantas cosas
que genera este ente rojo
cuando duerme mi razón.

Si la vida y la gente
me dieran la oportunidad
de enderezar mi camino
sentir como normalmente se siente
sentarse a esperar que llegue la muerte...

Definitivamente no lo haría.
No estoy aquí para ser igual que todos
y si dentro de mí sembraste una fuente
no tengo por qué taparla
con prejuicios innecesarios.

Amar así debería más seguido hacerse
te cura los males del espíritu
te avienta a los sueños soleados
te dan ganas de comerte al mundo
te vuelves un ser digno de amar.

Si como nubes y vuelo los árboles
¿qué más se puede perder
excepto las alas imaginarias que me sostienen?

El hoy es uno y por eso
me lanzo a pesar de los abismos
naufrago en la intuición de mi cariño
y reafirmo este sueño en mi propio mar.

Premier

La mañana parece como premier
a la entrada de Amarylis.

Debe ser porque con su nombre soñé,
señor,
debe ser porque su luz en mi ventana...

Escogeré una parte de tí

Escogeré
una parte
de tí
que me dé vueltas
el cuerpo
el alma
el corazón
y la cabeza,

Y convertiré
tu nombre
en los cuatro lugares
prohibidos
para cualquier
otro hombre
porque a ellos sólo se llega
con tu llave de ternura
y con tus ojos
de pirata de la liberación.

(Las nubes siderales
brincan como si de borregos
se tratara
el viento acaricia las praderas
que engendras
cada vez que pernoctas
mis palabras:

Soy tu luna
soy estos labios
soy tu venus
la mujer que se desnuda
en el escudo de la timidez).

Así me quedo
esta noche
con la parte exacta
de tu ser
en mi regazo
con tu voz
enmedio
de este silencio que abrazo:

Juro
que esta noche
yo hago milagros
tengo de ti
lo justo y perfecto;
tú tienes
mi corazón.

Le pago la apuesta a dios

Disecciono a Rulfo
a su Llano en Llamas
a su Diles que No me Maten
mientras pienso en tus ojos
en tus dedos
en la superficie donde no se naufraga
y en los remos que eres
porque navegas dentro de mí.

Es curioso cómo comparo la disección
de una obra literaria
en una rana que pudo ser príncipe
pero ahora le tengo que sacar el corazón.

Las obras de arte son para apreciarse
para quedarse embelesadas
para poner la cara embobada
para llorar, para tener una excusa
y ser sensible, vulnerable
frente a la persona amada;
para hacerle ver que no eres otro autómata
y que tienes corazón de pollo.

Quizá las monjas del colegio
tenían razón cuando decían
que todo era una obra de Dios...
A mí me daba tanta risa
imaginarme a un dios con paleta y caballete
o con plastilina y cincel
o con barro y martillo
dándole forma a los pájaros, a los alcahuetes,
a las nubes, al sol,
manchado todo él de colores el rostro
hecho un guiñapo, pero al fin creador.

Hasta que dios me dio en el tragamáiz un día jueves
uno treinta y uno del mes uno
cuando vi esa silueta silente
esa energía cinética en suspensión
pendida de tus dos ojos café claro
de tu bufanda de intelectual resignado
en tu sonrisa de niño bueno y algo asustado
en tu manera de caminar apresurado...
en tu voz.

Reconocí entonces que Dios fabrica, en efecto,
obras de arte:
decidí pedirte para embelesar mi rugosa existencia
amargada inocencia y mi acabada ilusión;
y desde entonces te miro como si fueras
de otro planeta
cada desperfecto te hace más atractivo
a mi apreciación
y tus dones se magnifican y retumban en mis pies
me sacuden las tristezas
y le pago la apuesta al creador:
perdí, y qué bueno
cuando dios quiere, mira qué cosas más hermosas
hace el creador.

martes, 24 de febrero de 2009

Jardín de invernadero

Escucharé el crujir de las ramas
como si fueran tus piernas
al ponerse el sol;

Y de alguna manera haré que existan
las manos enredaderas
para sentirte entrelazado a mi cuerpo
en esta tarde de azul terco
que me impulsa a quererte
en todo mi esplendor.

Veré que las horas
se hacen tibias entre tus yemas de orquídeas
y la voluptuosidad en tus dedos
emerge de mí un jardín de invernadero:
las flores más estrambóticas e inusuales
brotan en mis pechos
y por pies tengo nardos
que se abren en el crepúsculo
justo cuando tus ramas crujen en mi regazo
y tus ojos son dos semillas tiernas
que practican las artes
de la germinación.

Querrás saber por qué tantas flores
tantas hierbas, tanto verde:
la explicación es tu nombre
ya sabes que eres el edén
que sustenta las olas en mis caderas
y el oscilamiento de la tierra roja
en un acto subversivo
una eclosión de amor.

Alta marea

Entre dormida y despierta
la congoja da paso al mediodía
y el llanto por saber que eres sonrisa
se seca.

Lugares comunes pueden haber muchísimos
son comunes porque son míos
como mis cabellos a tu viento
en señal de que te entrego
lo que hay en mí,
malo o bueno.

A la vida la agarré una noche desprevenida
y juré que no soltaría la luz que me inspiras
cuando juro tu nombre
cuando beso tu sonrisa
la vida es una y es cierta
fortuna de conocerte más grande
no podría haber en este espacio de mi tierra.

Las piernas bien ancladas
en el mar de tus ideas
soy sirena, soy esponja
soy coral y soy ostra
soy de tu inmensidad el turquesa
que de noche se vuelve rojo
porque en está en alta marea.

Una flor

Una flor
un golpe de corazón
que entre mis pétalos se desgaja
como gotas de cristales multicolores
que a su vez la luz de tus ojos refracta.

Rendida al encanto
de la media luna que se pinta en tu cara
puedo hacer garabatos
estrellas silentes que te arrullen
poemas con un trozo de mi carne
para que sientas esta lava.

En este universo estoy
toda llena de tus corales
la piel seducida por tu piel de arena
te llama
como lo hace mi corazón
como te agradece que existas
mi alma.

Una flor,
una cajita que encierre lo que creo y pienso
creo en ti, pienso que nada es perfecto
pero te amo,
verdad del creador que eso en mí es cierto.

Y de repente brillaste

Y de repente brillaste
en el umbral de mi puerta:
yo no sé qué carajos con tu alquimia
pero de media hora para acá
estoy despierta
al milagro que se fabrican por estos días
a la magia de tu beso
que me mantiene a la expectativa.

Y de repente brillaste
en el umbral de mi puerta:
estoy por tí como hoja al viento
la dulzura de este baile
me vuelve especialmente sensual y serena.

No temo la noche
tus ojos me guían
porque de luz me llenan
para ser la mujer niña que te ama y te espera.

No me cuestiones cuestiones técnicas

No me cuestiones
por qué tú
por qué te elegí a tí
para escribir te quiero.

Pues la respuesta es tan grande
como el inmenso mar
que dentro de mí se agita
cada vez que te pronuncio
cada vez que tú a la hora de la comida
de las noticias, de la manejada enmedio
del terrible tráfico
cada vez que en las mañanas
me hago una idea
de lo bello que es por decir tu nombre
despertar y estar completa.

Puede que se deba a tu mirada
o tal vez a tu paciencia.
Puede que sea sólamente
de Eros una extraña jugada
o que simplemente
tienes lo que yo quiero
en el lugar exacto
y en el momento perfecto:
un hombre humano con el corazón de niño bueno.

No me cuestiones
por qué mis arranques
por qué mis achaques
de soledad si tengo en cuanto miro tu cielo
la oportunidad de volverme algo más
que un ente pesimista y ciego:
me vuelvo mariposa,
acaso una estrella que te hace la competencia
a brillar como tu cabello
a soñar con la mirada en el cielo
y los pies sobre la tierra.

No me cuestiones cuestiones técnicas:
es como preguntar por qué las horas
por qué los engranes de aquella máquina perfecta.

Si el amor se hace para vivirlo
si al amor no se le pregunta si estará bien o no
que uno lo sienta:
él es un rey y sólo arriba
con la mirada erguida, con la seguridad completa
de que el morador de esa casa le abrirá las puertas
tal como lo hice yo al despertar en tu cara
una noche de enero y con una historia
que ahora me ve envuelta
en los días más felices y raros de mi vida
por los que estoy segura nací
para conocer tu existencia.

Simplemente escucha que te amo
y si puedes, dale a este sentimiento
la oportunidad de ser
en el campo libre de lo incierto
que llamamos nuestro particular espacio.

Para Lulin

Estrella de jade
como las olas del mar del caribe te imagino
mis pies en la urbanidad arden
y mis manos se desplazan
a donde sueño encuentran su nido.

Es preciso que me escuches
y que pongas atención a mi plegaria:
yo no te pido para mí nada
excepto que me ayudes

A que el hombre que elegí para amar
sienta esta noche
y todas las que se puedan
la inmensidad de lo que dentro de mí late
de este sentimiento
que cobró fuerza
a base de meditar en su alma
y de besar en el sigilo
su noble y guerrero corazón.

Despiértalo de madrugada
haz que sienta lo que yo vivo por él a diario
y cuando le invada este sentimiento,
el mío,
dile que es Amor, algo qué él sembró
sin saberlo y con sus ojos buenos,
como de rayo benefactor,
en mí.

Haz que de alguna manera
él sienta por qué brinco los charcos
las dimensiones, los obstáculos,
las realidades preestablecidas,
las reglas,
dile que así somos los del 82,
que así es la que le espera
con el corazón en la mano
porque suyo es desde hace más de un año
porque seguramente para eso ella nació.

Amada Lulin
diosa que vuela veloz por este lado sideral
de nuestra existencia
cuando pases majestuosa
perfecta
por los campos que él y yo no vemos
pero que alguna vez olimos
y que oleremos cuando la vida así lo quiera
cuando tu cauda de organza de reina
toque su corazón, su puerta,
esta noche y todas las que tus polvos de luz
en su cama desprendas,
dile que lo amo
y que es con el entero de mi corazón.

lunes, 23 de febrero de 2009

Verbo ser en pasado y presente. Para él

Fuiste durante este día
la restricción autoimpuesta
a decir amor con todas sus palabras
sólo porque soy una tonta
y las tontas a veces también callan.

Eres el sol que sale en mi noche
lo que respiro para mantener en pie la batalla
ser mujer con mi nombre
es casi como lanzarse desde lo alto de una montaña;

Sigues siendo lo más puro
que he podido ver en este suelo otrora hermoso:
jamás conocí el paraíso
pero ya no lo necesito desde que vi tus ojos.

Sigues siendo,
también,
lo más bendito que le ha pasado
a esta mujer con el torbellino provinciano por vida
una suerte de remolino que llegó
para alborotar su melancolía
una estrella que flota entre sus piernas
y entre sus manos y entre sus besos y sus alegrías.

Para mí lo eres todo, merced del tiempo
de las distancias
y de que me he olvidado de toda lógica
y de toda epistemología:
aprendí a amar a ciegas
con las tres veces que miré tus ojos
y desde entonces viajo
sueño cuesta arriba
con que por las noches riegas este desierto
y lo vuelves el jardín de tus días.

Esta pluma

Acaricio esta pluma
en señal de que deseo ver
un cometa o tu sonrisa
y así apropiármelos, hacerlos míos
amuleto que me mantiene caliente
el café que no tomo de día
porque no necesito perder el sueño.

Miro las estrellas:
ellas también tiemblan corazones
igual que la osadía
de mis letras.

Saldré a buscarte
o mejor aún
zambulliré mi cuerpo en éter
para ver si ahí te veo.

(Está demás decir que te quiero
y que ilógicamente
te espero).

domingo, 22 de febrero de 2009

Soy yo

Sí, soy yo
la que siempre hará las cosas al revés
la que es un impulso de flor
la que te ama bien
la que mira la realidad con los ojos
pero se mantiene viva por volver a escuchar tu voz.

La estoica
la silente,
la apasionada
la urgente
la solitaria
la displiscente
la atolondrada
la sonriente -por tí, mis manos no mienten-
la tierna
la sarcástica
la irónica
la acursilada
la valiente
la iluminada
la que no espera nada
mas que vivir como vengan los días.

Soy yo,
la poeta en la luz que te ama
la que te ha escrito tantos y tantos días
y a pesar de que tal vez una realidad inconfesable
por error de la gracia de un niño cósmico
te haya sido revelada
no se arrepiente de nada:
grita "Jerónimo" y se lanza
con los ojos tapados
con el corazón a tí entregado y desnudo
con el orgullo a gatas
y con la esperanza descalza.

Esa soy yo.
Este amor te entrego.
Honra no me falta.

sábado, 21 de febrero de 2009

Ah, la vida...

Ah, la vida:
esos foquitos rojos
que se enredan en los árboles
esas lunas de plata
que me cuelgo en las laterales
esas musas en gasa
que emite tu cigarro
para dejar ir las ideas
y permitir que otras se instalen
esos pasos en la azotea
de los gatos callejeros
que me despiertan a ver si tu nombre
está en mi almohada
si tiene frío o si quiere que le cuente un cuento
estos silencios
a veces mortales, otras eróticos
y muchas veces tiernos
estas manos, tus manos
que corren juntas bailando las huellas digitales
que el otro dejó como asertijo del momento
estos días, más de un año
en el que mi vida es más tranquila
y no hay ogros que me quiten el encanto
estas faldas, estos pantalones
mis botas de los dieciséis
cantándote versos en punto del sereno...

Ay, amor, esta vida
es la que mejor se acomoda a mis caderas
a la que de entre todas las que me ha tocado
jamás le pondría un pero:
esta vida es sencilla y luz
porque así eres tú
y la vida así de feliz es tu espejo.

Mira que miré bien

Y mira que miré bien
entre cada uno de los que caminaban
dando de vueltas
arrojando de pan las migajas
mirando a ver qué caderas encontraban
comprando elotes
masticando chicle
contando sus cuitas
tomándole fotos a la catedral.

Y a pesar de que hubieron unos
que hasta canciones evocaban
otros
que un perfume de bosques añoraban
otros
que la ternura su escudo anunciaban
y otros tantos
que buenos recuerdos ostentaban;

Jamás vi otros más preciosos que tus ojos
ese par de niños que me tienen a tí atada.

Es inútil, pensé con bandera blanca entre las manos:
tus ojos tienen el tamaño perfecto
el universo adecuado
las pestañas más sensuales
-como una alfombra de flores en despoblado-
la divinidad compacta
en ese café claro;
me dan pase abierto
a la paz que en ningún otro par encuentro
tus ojos son únicos
aunque haya billones de seres esperando en mi puerto
será porque para mí eres único
será porque en verdad te quiero.

Las mariposas son como amarillas

Las mariposas son como amarillas
en esta tarde de feneciente febrero
son las caras pingas de los niños
son los ojos tiernos de un anciano bueno
son las palomas que vuelan en desenfreno
es la luz entre dorado y malva de este cielo;

Lo que me hace pensar y sentir
que estás tú conmigo a pesar de estar tan lejos:
la sopa cuántica se compacta entre mis dos piernas
y te siento anclado desde la raíz de mis cabellos
hasta el punto final de mi cuerpo: a veces el meñique
otras el cuello
muchas estas manos, este corazón, todo.

Miro hacia las nubes y
me miro entre pelusitas doradas
es el aire puro que seguramente exhalas
son tus ideas que a la velocidad de tu luz
hasta mi seno viajan
es este beso telépata
carajo, si la gente supiera
que ya encontré la manera de vencer las distancias...

Soy egoísta:
si encontré este amor aquí dentro
es porque la espada esgrimí
hasta dar con tu sonrisa;
que los otros viajen igual de intensos
que los otros luchen y lloren cenizas y fuego
tal como lo hicimos tú y yo
para poder colapsar nuestras auras
y conocernos.

Las mariposas son como amarillas
indican la primavera perpetua en mis labios
indican que llegó contigo.

La nave

Toma mi mano
imagínate que soy una nave
y te llevo a los confines de mi universo
para que reconozcas sus montañas
sus ríos y sus mares.

Cogeremos una jicarita
y tomaremos la alegría plena
de estar juntos en este momento
en esta dimensión
y con la gracia de tener nuestras manos despiertas.

Construiremos canciones
que habitaremos al anochecer
y mientras vemos le paso de mis lunas
de menguantes a llenas;

Bajaremos como lluvia
y regaremos la flora bendita
que hay en tu piel de arena;
sembraremos tú en mí
y yo en tí
la prolongación de nuestras sonrisas indiscretas.

Toma mi mano
imagínate que soy una nave
y te llevo a los confines de mi universo
para que reconozcas cada uno de mis versos
para que alumbres mis creaciones
para que vivas este beso.

En el país

En el país de los te amos
la vida corre al revés de los relojes
y el tiempo se vuelve un beso sin despedida
las mujeres como yo
escriben a los hombres como tú
amores
y el mundo es feliz
porque cada quien encuentra
lo que busca y a su medida;

Nadie llora por tristezas
acaso el éxtasis les arranque
lágrimas de libertad y de entrega
las banderas son todas blancas
algunas rojas en época de pasiones
pero ninguna es gris
ni está maltrecha.

Al país de los te amos se accede
encontrando una razón para su existencia
una suerte de nombre como el tuyo
combinado con la energía de su entereza
la dulzura de tus ojos
y la ternura de tu nobleza.

Afortunada yo,
que tengo pase directo
a esta zona en donde vuelvo a ser
ingenuamente pasional y traviesa...

Contigo el mundo se vuelve una flor
un beso en las aceras.
A este mundo lo llamé mi país
porque quiero que tuyo también lo sea.

viernes, 20 de febrero de 2009

Cosmogonía de mi propio universo

Me paro en tu elipse:
bailar al son de tus líneas
sienta bien al alma
me hacen sentirme en paz.

Giro. A tientas, feliz y descaradamente enamorada
a mi edad son pocas las cosas que se guardan
en el corazón y no en las fotografías o las memorias empolvadas:
tus ojos, por ejemplo
están en el ventrículo izquiero de mi corazón
tu sonrisa en el derecho
tus dedos en la aorta
y tu ser entero en medio de toda esencia de mi cuerpo
mucho más alla de la razón.

Permanezco. Me gusta observar
cómo brillas en mi cuerpo
eres todo luz, a pesar de ser tan imperfecto
será por eso que eres la deidad humana
que protagoniza la cosmogonía de mi propio universo:

No sabes cuánto te amo
qué suerte es ser un astro con su propia estrella
girando alrededor de ella
y con ella dentro al mismo tiempo.

Abraza

Estas paredes que tu nombre evocan
las sábanas, las arterias
las letras a medianoche
la virtud que me vuelvo si con tus ojos me tocas.

Abrázame esta luna
los besos que te entrego
abraza una a una
las flores que te regalo
porque las flores son para admirarse
deshojarse, olerse, llorarse,
sonreírse,
y no para los entierros.

Abrázame las noches
en las que con tu nombre en mi almohada me duermo
abrázame los escalones
que subo poco a poco
hasta alcanzar lo bendito que es tu cielo.

Abrázame hoy, amor mío,
cuerpo de luz sereno;

Que un abrazo tuyo es igual a permanecer viva
un homenaje a nuestras almas
a la magia sideral
que juntó un día nuestras historias,
nuestras mentes, mi corazón a tu eco,
nuestros cuerpos, este beso en tu cielo.

Y cuidado con pensar

Y cuidado con pensar
que la vida es el llanto amargo
los dioses te traen el regalo
de sus ojos chiquitos
a través de dos cristales
que a la Vía Láctea dan.

Porque si de tal osadía te ostentas
puede ser que el brillo que proyectas pierdas
recuerda que para brillar
se necesita de un astro rey y de un planeta.

Y bautízalo como quieras:
Ra, Sol, Estrella de Bolsillo
Corazón de 3000 Watts;
la esencia es la misma
llegó para quedarse entre tu biósfera
y en tus bosques malvas latientes
su casa él tiene ya...

Hoy es un día importante
es el día en el que reconoces
(porque lo sabes)
que la vida es divina
porque conoces la luz y lo que es amar
de verdad.

Gota de agua dulce

Seguir el curso de tus pasos
es más o menos igual
a subirse a una montaña rusa
y navegar y navegar...

Con la esencia encerrada
en la típica historia
de una anciana antes de tiempo
me voy haciendo joven poco a poco
cuando descubro que por tus años
yo encuentro una razón para sonreír.

Así es el día en mi calendario
pueden cambiar las fechas
pero a mí me suenan a la misma
es tu nombre, son tus teoremas
tus angustias, tus problemas
las canciones que cantas aunque no lo parezca
lo que hace que los días brillen
y yo paso siempre al nivel de las nubes
paso por tí para hacerme de luces
y coserme un ajuar para tus praderas:

Mereces ser la sonrisa
que a mi mundo embelesa
nunca dejes de ser la gota de agua dulce
que entre mis ojos y mi corazón
se vuelven un Mar de amor puro para tí.

No me preguntes qué día es hoy al despertarme

No me preguntes
qué día es hoy al despertarme
simplemente dime que existes
que dentro de mi cuerpo ardes
que entero eres el beso que me sigue
allá donde mis pulmones respiren
y mis manos el lenguaje del amor te hablen.

Estoy consciente del tiempo
pero, amado mío,
niño guerrero, dulce e inquieto,
arrojé al mar de llanto los relojes con sus minuteros
la misma noche que tus ojos café claro
se cruzaron con los míos negros;
y el punto del no retorno inició
con tu nombre a bordo de mi pecho:

Mi corazón hizo una promesa al tuyo
mientras yo dormía aún
el sueño de los tristes por culpa de los injustos:
me entregaré a tí cada día
hasta que el fragmento de este universo fracase
y los dioses pongan a caminar uno nuevo.

Hay mucho camino por recorrer
aún nos quedan muchos fósforos-días
en la cajetilla de la cama y los te quieros;
hay un sin fin de atardeceres por recorrer
mientras probamos lo salado y lo dulce
de cada centímetro cuadrado de nuestros cuerpos;
hay muchas noches por bailar
y para morir y renacer el uno en el otro
a grito abierto;
y hay muchas mañanas para adorar
la bendición de la luz en nuestros ojos,
símbolo de que a la vida estamos plenamente despiertos.

Así que no me preguntes
qué día es hoy al despertarnos:
es el mismo día de siempre
te lo puede comprobar
la línea que se me escapa de la palma de mis manos
sólo para dar con las tuyas
y decirte que este corazón es tuyo
porque yo, su dueña, le ha pedido que te ame
tanto como yo sé que te amo.

Entre el valle de cielo malva diviso la entrada de tu sol

Entre el valle de cielo malva
con el suelo de polvo de ocre y naranja
diviso la entrada de tu sol
montado en las dos columnas de oro
que son tus piernas.

La ropa de la Luna la tienes a tus expensas
sus telas se tienden sobre tí
y el viento te convierte
en mi sonriente y guerrera bandera.

En tu cara se divisa la buena nueva:
la liberación de la soledad y de la tristeza
se anclan en mi garganta
como si fuera el trago más dulce
que haya probado en esta Tierra.

Será porque las palabras de luz
las trajo tu boca,
será porque en tus pies camina
el sendero sin fin
hacia la quinta esencia
que es una mañana de abril
en un mes cualquiera
cuando tus manos tocan mi guitarra
y me cantan la ternura y la fiereza
que palpitan bajo mi pecho
mientras que entre mi seno tus flores me dejas.

Entre el valle de cielo malva
con el suelo de polvo de ocre y naranja
diviso la entrada de tu sol
montado en las dos columnas de oro
que son tus piernas;

Entras por los cuatro puntos cardinales
haces uso de cada sílaba y de la música
que hay en tu nombre y en sus letras.

Y por cada paso que ondeas
se me ilumina el cuerpo
y la gente lo nota
y la curiosidad mi alegría despierta.

Y es que en tu cara
apareció la buena nueva:
hay amor en mi alma
y este amor quiere que tuya sea.

He florecido. Todo se lo debo
a tu presencia.

jueves, 19 de febrero de 2009

Amor sideral escrito en un papel

Porque entre la nebulosa
del miedo, el frío y la maldad
existe un hoyo blanco
que directo a tus dos ojos da;

Porque nombrarte es igual
a recordar las rondas de mis cinco
los dibujos en el aire
los cantos de un niño;

Porque roja es la vida
si la veo con el corazón
puesto siempre a amarte a tí;

Por eso y mil pequeñas maravillas
que sin quererlo
y con que simplemente la grandeza de tu ser exista
haces que yo vea mientras camino
directo al cielo
que eres tú y sólo tú
para mí;

Alabaré tu nombre y tus defectos
y ensalzaré tu gloria y la grandeza de tu ser
como me sale mejor
en estos tiempos:
besos-versos
palomas-poemas
caricias-pensamientos
amor sideral escrito en un papel.

Como la promesa de Ra

Como la promesa de Krishna,
de Venus, de Isis, de Casiopea,
de Amatista y de Ashtart
llega a mí la noción de tu existencia
que es una gota que baña a una hoja verde
que es la luz que a las flores de mi jardín alimentan.

Si por la paz de saberte vivo y en mí
yo tengo
que pasar por los estadíos de la imperfección
hasta la pureza
o si nada de esto es cierto
y sólo necesito latirte, respirar
en el aire que eres
y tomar el agua que me refresca;

Entonces, yo pago, Sol de mis bienaventuranzas
las que ningún libro escribió
porque ese libro es mío
yo pago todo avatar y toda fortuna
porque la dualidad está inmersa
en esta rueda, que le llamamos vida
y que es en tí su figura.

Como la promesa de Ra y de Quetzalcóatl
está tu nombre
tus gafas y tu entereza:

Así cada día yo te sigo venerando
y te amo aún más y mejor
que el primer día.

A la paz de tus ojos

Cuando las fierecillas me juegan sus bromas
me arañan las entrañas
y estalla el mal humor;

Corro con la gracia de Saturno
donde tu fotografía bendita
pegada justo detrás de mis párpados
para que mis pupilas siempre reflejen tu rostro;
Viajo sin mochila donde tu sonrisa
viajo desnuda donde tus dedos
escurro sal y miel por hallarme palpitando tu nombre...

Vuelvo y me instalo en la paz de tus ojos
vuelvo y me instalo en la luz de tu mirada
vuelo y me instalo en la paz de tus ojos
vuelo y me instalo en la paz de tus ojos
vuelo y te amo como mejor me sale
con el corazón en la palma
y mi cuerpo como estandarte desplegado.

Vuelvo y me instalo en la paz de tus ojos
mirarte en mis pupilas
es el regalo que algún dios del amor y la sabiduría
me dio para que al fin fuera feliz.

Cuando las fierecillas me juegan sus bromas
y me arañan las entrañas
corro en pos de la paz de tus ojos
y la cura se manifiesta como si milagro de iglesia fuera
en días de celebrar.

miércoles, 18 de febrero de 2009

No me pregunten

No me pregunten
cuándo es el festival del templo budista
si las encuestas salieron bien
si tengo cara de masoquista
si declamaron bien los enanos felices
si las termópilas
si hice el análisis estruturalista de Benveniste
si las clásulas del taller
si leo en zig-zag
si las reseñas
si las revistas.

Es el momento de lanzar besos
de fotografiar a mi corazón
de intentar hacerle versos
al hombre por el que supongo
veo la vida más bonita:

Es mi hora, señores,
ella está con ustedes todo el bendito día
sirvo para servir
entrego todo cuanto puedo
pero no me molesten este momento
este es mi espacio
yo necesito escribirle un himno nocturno
al amor de mis cuatro estaciones
al hombre que existe en mí
y que no invento.

Salve

Cuando se ama tanto
los que amamos así
nos volvemos locos
ante los ojos de quienes
no han sido tocados
por la magia de ser amados
o de sentir así al amor.

Ya llevo varios días
e intento convencerme
que adquirí esta membresía
desde que me decidí
con el alma a quererte.

He perdido la noción
de los conceptos vacuos
que se hacen en nombre del progreso
fechas históricas de mis antepasados
fórmulas de química inorgánica
factores de estadística
y una que otra capital
de este mundo raro e inconexo.

La perdí cuando me desnudé
de ese cascarón de biblioteca ambulante
dejé de leer la tinta para dedicar
a hacer garabatos
intentando decirte que sólo sé amarte
porque así es la vida
porque en esta etapa
me tocó que me conocieras
e incluso pienso
que en ella me hiciste nacer
que en ella me hiciste nacer...


Dicen que los que aman
se vuelven locos
me da un gusto enorme,
como no lo ven esos ojos,
porque ciegos están de amargura
porque no han tenido la fortuna
de mirar tu luz.

Doy un salve a tu pureza
a mis delirios de Eros
y de mujer en la veintena;

Lanzo un salve a tu boca
a tu piel que nació en el desierto
pero que lleva el agua que me alimenta:
Salve Dios a los locos de amor,
porque de ellos,
será el reino de los cielos
enmedio del caos en esta tierra.

La morena

Sale con la espalda empapada
morena toda ella
es un cedro de ascendencia mexicana.

Mira como las guerreras chichimecas
hace tiempo que quedaron enterradas
seguro vino su tatarabuela
y le sembró coraje
porque cimbra el suelo
cada vez que por la cuadra pasa.

No sonríe, no hay motivos a la redonda
y sin embargo un aura angelical la cobija
tiene un pequeño que apenas dejó los brazos
él la verá hasta la tarde
cuando la morena cansada llegue
de entregar las manos con tal de que no la despidan.

Quiere un gansito
la madre le dará un plátano:
hoy en día las monedas del salario diario
acaso alcanzan para fabricar sueños
enmediode un pantano.

Y por las noches, cuando por el pan convertido
en objeto suntuoso
salen el niño y la morena,
el terregal que por mi casa se despega
es la cortina de un telón de fondo;
aparecen magos, aparecen hadas
y la morena sonríe sus ojos:
ella sabe que su niño tendrá otra sonrisa
cuando a su progenie lleve erguido de hombros.

Regálale una sonrisa al cielo

Regálale una sonrisa al cielo
estaré pronta para verlo
en cada nube,
allá donde tu dedo,
haga surcos en mi alma
para amarte otro poco.

Allá, donde lo exquisito
y lo eterno
se fundan en tu nombre
y me acerquen otro poco a Dios.

Regálale una sonrisa a mi planeta
y te juro que te amaré tanto
como mis segundos en esta Tierra
me lo permitan
tanto como mis poros puedan
tanto como mi corazón resista
a crecer de tanto amor.

Caballeros

Por caballeros como tú
una mujer como yo
se viste de flores a pesar del invierno
e imita los estivales colores
para acentuar lo bello que lleva dentro.

Por caballeros como tú
una mujer como yo
aprende a vivir tranquila y confiada
pues además de caballero eres mi héroe
una suerte de portento terrestre
de edición limitada
y sólo para mí, que te llevo en el corazón
y muy adentro.

Por caballeros como tú
corro la Tierra entera
navego en mares y en estrellas
me siento diosa griega
digna de ser amada
y digna de dar amor.

Por caballeros como tú,
una mujer como yo,
le pinta flores al espacio sucio
borra grises y regala fulgores
cuando tu nombre dice gritando
a veces el corazón muy amplio,
a veces un beso íntimo y en un suspiro quedo y despacio.

Por caballeros como tú,
una mujer como yo,
pierde la compostura
esa abuelita regañona
a la que le echo tierra encima
y la ahogo con cada poema
que gravita en este espacio sideral
que he fabricado para tí
con todo este amor.

Por caballeros como tú,
¡Caramba, la Vida!, amor mío,
se mira como un planeta de cristal colorido
y los besos saben a miel y a eternidad
por caballeros como tú.

Subiste la escalera de caracol

Subiste la escalera de caracol
toda reburujada
como un reloj infinito
sólo para rescatar a la princesa del cuento
que en la sombra vive desencantada:
ella era la rana, se volvió luz con tus besos
y hasta poemas de corazón
como invadida por Eros
sólo por tu nobleza
aprendió a hacer.

Me pregunto si todas las mujeres
tendrán la fortuna
de presenciar este tipo de rescates:
yo creo que habemos muchas ranas
pero sólo somos pocas
las que tenemos chance
de ser humanas
porque deseamos amar con el corazón.

Los hermanos Grimm se la perdieron:
esta es la mejor historia
de todos los cuentos de hadas
que ya no cuento
porque la realidad supera toda fantasía
porque estás dentro de mi corazón
exhalas oxígeno en mis neuronas
y navegas libre por mi cuerpo.

Si mis manos

Si las palmas de mis manos hablaran
te dirían, dulce niño mío,
que cada noche se arrugan, se extienden
se desdoblan, crujen,
sudan, marchan sobre las teclas,
se disuelven,
se quejan, descansan,
vuelven a ser ellas.

Y todo es porque yo les ordeno
que también sean un corazón
un puente entre la lógica y la no razón
para amarte a ciegas,
serena, confiada,
feliz y entregada.

Canela

Camino feliz entre el fango y las tinieblas
porque tengo un sol en mi alma
que me siembra amor
por las manos en las que mi dios Ra de bolsillo
en esos rizos y esos lentes encarna.

Canto sola en el auto
y doy a otros la oportunidad
de que locos me crean:
a otros el tráfico les llueve pesares
a mi transitar entre desquiciados no me pesa.

Porque tengo en mi frente su nombre
y en mi interior su insignia:
soy su mujer, yo lo amo
y disuelvo en canela las angustias
que los segundos a veces en mí despiertan:
los besos de mi hombre
saben desde ahora
al fruto más delicioso
que exista en la Vía Láctea entera.

Camino derechito hacia sus lunas
sus lunares, los planetas que hacen de él
la encarnación de Eros
en pleno siglo XXI
y con todo lo que implica
conocerle a él a tiempo
porque suyas son mis faldas
mis cantos, mis búsquedas
-siempre dan a su estrella
todos los caminos dan donde él-
mis anhelos, mis despistes,
la ternura y hasta la fuga de mis enemigos:

Perpleja como narciso en el estanque
así estoy yo, pero de contemplar
lo que nadie mira en él cuando duerme:
ese dulce, bello y tierno corazón.

Yo doy la vida por este sueño

Si sediento estuvieras
porque la sorpresa se convierte
en una escena que no esperabas ver;

Abre mi cuerpo, bebe de mi agua
estoy aquí para cuando un abrazo te haga falta
estoy aquí para que sepas
que en este mundo, siempre hay alguien
que en tus ojos tendrá fe.

Yo no sé si tantas almas
yo no sé si estas palabras
en tus ojos y en tus oídos ya habrán sido posadas
pero sí sé que eres mi todo
que confío en tí más
que en ningún otro
como creo también
que por cada paso, acción, respiro,
palabra, palpitar
haces que este mundo gire,
eres una pieza en este espacio...

Uno que se abre y se divide en otros pequeñitos
eres una pieza de este espacio.
El mío, para empezar:
le das cuerda, le pules los engranes
le das color a sus canales
y me pones de nuevo a girar.

Yo doy la vida por que este sueño
de verte erguido siempre
siempre feliz y siempre guerrero
sea la huella digital de tu nombre,
el mismo al que le rezo,
al que le doy gracias
porque al hombre que lleva dentro
me permite amar.

Entre mil

Hoy, al caminar rumbo a la vereda
que da hacia la noche
que da hacia esta puerta
me di cuenta
que podrán haber mil ojos de hombre
pero ninguno mirará
igual que tú.

Entre mil hombres te elijo
eres mi sueño, mi sol,
mi pan, mi religión y mi alivio
eres el todo, mi propio planeta de luz
y además, eres de bolsillo...

No cambio las fechas
las horas ni los días
te tengo en mi vida, eres mi sangre
estás entre mis costillas;
eres la raíz que me anuda a esta tierra
y por tí sonrío feliz:
motivos tengo si miro tus dos cafés cuencas.

Habrán mil pares de manos
mil sonrisas buenas
pero te elijo a tí,
guerrero amado,
para que con tus manos
peines a este corazón
que te manda besos en forma de letras...

martes, 17 de febrero de 2009

A unos zapatos

Porque lo mantienen erguido
porque dan pisadas fuertes
cuando a imbéciles callar es necesario
porque le sostienen derechito al cielo
con sus actos de guerrero de acero inoxidado
porque lo cuidan
porque lo hacen gallardo
porque cuidan de una parte importante
del hombre que yo rodeo con el pensamiento
con el corazón y mis brazos.

Porque lo mantienen a esta tierra
con los pies bien puestos y conectado
Porque lo llevan por el sendero de los buenos,
van estas letras,
de mi hombre, a estos zapatos.