Camino
Camino de patio
Camino hacia el patio.
El sol es una pistola
que invita
al suicidio del más inmenso
de todos mis sentidos.
Silencio. Basta.
No me calles.
Suficiente hay para combatir
la frontera en la que vivo
raya de tiza
desde la proclamación de tu exilio
para mi voz.
Afuera hay las nubes y el condominio
tus libros
tus firmas suaves de muslos muchos.
Yo no.
Así que escucha esta lluvia desértica
como si no supieras lo que es llover.
Deja que las grietas de mi piso
(el que antes sembraste de flores y luz)
palpiten este séptimo día
cuando dios se quedó dormido
y me arrojó al viento
el decreto de amarte por amor.
Y si te suena a beso desemedido
a deseo sucumbido
a trineo con cascabelito perdido en tu estación
entiéndelo tus labios bien:
la culpa no soy yo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario