jueves, 5 de marzo de 2009

El regalo de Zeus

Y aunque en hiedra o hiel
pudiera mantener mi día
el sol que me alumbra
el que sé que vive y existe
al que le entregué mi franca osadía.

Me mantiene en pie
desde mi país te canto esta alabanza
por tantas horas y planetas
por tantas alegrías en mi arena
por este amor que me sembraste
sin quererlo
como un regalo de Zeus
para esta mujer morena.

Cuando se ama así pasa:
una sigue cantando
los días malos en realidad dejan de existir
para siempre
(llevo mi amuleto de cuatro sílabas
pendiendo de mi pecho
y a tus olas lanzo este beso
para que estés con mi dios).

1 comentario:

guty dijo...

NO SOY MUY CULTO NI MUY LEÍDO, PERO ESTO ME GUSTO, ADEMAS A PESAR DE NO ENTEDERLO SIEMPRE HE PENSADO QUE EL FRANCES ES UNO DE LOS IDIOMAS MÁS BONITOS QUE EXISTEN.