Habrá que crear una cana
para esconder la vergüenza...
exhala el viento la esencia
pare besos sin alquitrán
y la estulticia nos recuerda
que muerta está.
Tú no cantas el asfalto hundido en las manos
tampoco cantas los vencidos, los adormecidos.
Tú cantas poesía cuando abres tus ojos
tú inviertes la poesía cuando al mundo
regresas su estado primigenio
la prístina dulzura del banco etéreo
aún existente lleno de la paz
la libertad que ambos nos damos
mientras creemos que dormimos.
Tú no eres la frontera invisible
tampoco eres la bandera blanca del ensueño americano.
Tú eres el suelo digno
de perpetrar por la fuerza
de algo que nos hunde
en el rayo del redescubrimiento
del verbo y el contenido
del sustantivo y el continente moreno entero.
Tú eres la marea roja y alta
también eres la misma lava
con la que despiertas la libertad.
Yo estoy mirándote con los ojos
que tengo en medio del pecho.
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2 comentarios:
la fuerza del brazo se puede medir en un golpe, la fuerza del alma en las palabras que de esta puedan salir, el cantar implica un alivio del sentimiento.
Cantando la poesia es navegar en la marea del sentir sobre el barco del decir
Oye, qué lindo suena eso!
Gracias! (Aunque no sepa tu nombre, siempre es bueno recibir poesía. Gracias otra vez).
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