Nadie es culpable
del acto de embosar con la palabra
la posible creación alterna
del universo paralelo que se queda paralizado.
Vigilemos las estrellas
hagamos el amor
creando un lecho que no fabrique pesadillas.
Y la canción de cuna,
esa corre por mi cuenta
desde aquí y hasta donde se halle
el trinar del azulejo.
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