Entre los pliegues del universo
ocho años después
la salud de los axiomas
su turgencia milenaria
humillando la tiza
Todo arriba con sus máximas de justicia.
A más Delta entre n gentes
a tantos años...
Equidad, regrésanos tu nombre.
Dos mil trece.
San Agustín, levántate:
arriba es abajo.
La perfección de Dios está contenida
en sus matemáticas
antes que en sus leyes.
La justicia divina es una ecuación con resolución perfecta.
Mis dedos blancos dejaban de escribir poesía.
Otra vez volvía a ser emisaria
de los números del cosmos y su semiótica
Otra vez intentaba la perfección
de un hipotético jurídico en tierra.
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