jueves, 31 de diciembre de 2009

Bautizo

No crearé al callar la distancia
ni cerraré los ojos para no enlazar mi ombligo lunar
a las palmeras de mar desértico que es tu nombre
le hace frente y lo evoca.

Es este silencio el puente más azul que tengo
para decirte que estoy a tu lado
porque te llevo conmigo.

Te llamarás fe,
aunque a veces ni tú mismo te creas la designación.
La fabricación del nombre o su razón.

Así te bautizo muriendo este cuerpo de tiempo
y así te llamo en el ahora violeta
que miro en ti
a kilómetros de tu aura que me llena toda de alegría sutil
para bajar de los infiernos del mundo
y galopar resquicios de luz
todos saciadores del hambre voraz que llevamos en el alma
de poder ver lo prístino
en el mismísimo caos de dios.

Selene en diez

Miraba la última luna llena de la década
cuando recordé que su luz al final
le entregó más que semántica a mi destino.

La contrariedad se queda siempre sola
al hablar de la completud;
y a pesar de eso soy paradoja en muchos instantes:
tú sabrás desde siempre
a qué me refiero cuando soy más que rosa cursi,
Venus atípica nacida en la tundra de tus reflejos
que alza sus brazos sólo para arrullarte
en la paz de mis silencios repletos de amor.

Al finalizar el rastro del camino de la cauda selene
supe lo que es el paso del umbral del nunca
a la eternidad de un beso en los bolsillos.

Parada final de mi autobús con nevera integrada
y cientos de estrellas para darte hasta el día de mi muerte.

Todo sería mejor

Sulfuremos mares
aligeremos la carga del Atlas que no fuimos
y jamás seremos por decreto universal.

Quedémonos desnudos,
sí y qué...

Todo sería mejor
si supieramos entrambos
que contamos uno al otro
con el cuento perdido en los hombros
y la boca llenita de dulces
que son mantos y son ósculos perfectamente horizontales
para ver de nuevo la luz a través de ellos,
justo en nuestros espejos-pupilas.

Año nuevo

Me gusta ver el año nuevo:
los niños son los únicos con cabezas de bengalas,
los adultos adulamos al señor capitalismo
luego nos ponemos a bailar
atragantándonos de uvas
para no decir una palabra de verdadero amor.

Vayamos al rincón de sideria más luminoso
ahí está el verdadero regalo
cuando dos o más seres se entienden.

El poder de la bifrontalidad

Y los cinco besos se deslizaron
hasta formar la estrella de cinco picos
justo donde el vientre es montaña serena
que platica con el valle de la vida.

A esta savia le encantaría ser el mensaje volador
condensarseen lo más dulce
que pueda estar junto a esos labios.

Existe el poder de la bifrontalidad,
aparece siempre después de la ficción
y un poquito antes de la poesía.

El poema eres tú cuando ríes.

miércoles, 30 de diciembre de 2009

Letras

Gracias al destino
que finalmente me trajo a mi punto de partida.
Creo haber sido hombre,
creo también tener un poquito de tu elixir en mi sangre.
Te dicen letras y yo sé que eres la vida entera.
Te dicen musa y yo te siento como mi amante.
Te dicen necia, sufrida, y yo sé que eres un regalo
de dónde vengas, quién sabe,
pero tus besos calan cuando la soledad se puebla de tu música
y las horas no pasan porque se vuelve el Universo uno solo
cada vez que respiro tu calor.

El sonido justo

Algún día encontraré el sonido justo
para retribuirte la fuerza de amor
que me has dado
en ese verso desaliñado
en esa mariposa blanca que eres
a pesar de tus tristezas.

Cuando lo encuentre, lo anotaré en las estrellas
para permanecer eterna a pesar de mi muerte
para hacerte una leyenda con tus lunares transformados en planetas.

Algún día encontraré el sonido justo
para decirte lo que has sido y eres
cuando mi mano estuvo a punto de cerrarse en puño
y amaneció cubierta de flores nuevas.

Runas

Runas cibernéticas:
hoy quisiera no ser la palabra grave
y simplemente sacar las escamas al sol.

Aunque la niebla impere y pernocte la cama.

Archivo

Palabra, poeta, música, esplendor, grafito, teclado, café, sonrisa, memorial.
Así son los 27 años sin la carga de malicia
por un rato
y a consciencia legítima
de que nada ha sido un error
cuando se ha vivido de todo.

Puedo juntar las manos

Puedo juntar las manos
y alzar una oración por mí.

Pero no quiero.

Pido felicidad para los que me han hecho la vida existible:
a todos los llevo conmigo
aunque a veces no sepa decir que me hacen falta.

Larga vida a los cantadores
de mi existencia.

Es el creador el que se multiplica en sus ojos,
no en las plegarias de las oraciones parroquiales.

Útero

Levanta el canto en tu ola,
hay razones para bailar en la hora ciega
donde todo vuelve a ser paz
un útero detrás del violento mundo.

Serás el mar y el poeta,
rey sol,
aunque te escondas en la turgencia de las nubes solívoras.
Si el cielo quisiera pintarme una jugada gris
esta noche juro
que en mi techo y en el tambor perpetuo
habrá technicolor.

Saturno sabe que no me salen las mentiras.

martes, 29 de diciembre de 2009

Si hay algo

Baileys y mi madre conmigo viendo el televisor.
Señor, si hay algo por lo que aún creo en ti,
es precisamente por el rostro que miro
cuando nadie más sabe lo que estoy sintiendo.
Se llama ella.
Y es toda mía.

Este espantoso frío

Odiaría el espantoso frío
de no ser porque tiene cierto encanto masculino
un no sé qué que qué se yo
será porque es elementalmente hombre
la parte azul de la madre tierra.

El barco al polo sur o norte
se ajusta bien a sus piernas.

Santaclós, obviamente,
no está aquí para redimiros del viaje de primavera.

Está la estrella que tampoco es de Belén.
Es única y se asoma a quien quiera verla.

Mirad bien,
es la sensualidad de Celeste
la que toca la puerta.

Tres letras

Tres letras hacen un puente
tres y no tienen de sí consciencia
tres y son iniciales sin significado
tres con un verbo que les da fuerza;
tres letras y paras al mundo de frente
tres y la escotilla al núcleo dejas abierta.

Hay que saber reconocer y borronear parlamentos
que llevan injustamente su ausencia.
Cargar esas tres letras todo el tiempo
moverse entre ellas como si fuera la única verdadera fuerza.

Tres y este poema...

Una canción galáctica

Una canción galáctica
para brillar de puntitas frente al sol de invierno
sarape entre las tinieblas del rey gris.

Una flor para el abrazo más esperado
de todos los tiempos,
un poema que no resulta poema
para estar feliz
simplemente porque lo que quiero
lo tengo a mi lado,
está aquí.

Compás

Ese compás remontándote a los ochenta
el mundo habría sido mejor si tu adolescencia
la hubieras vivido ahí.

No.

Nada cambia.
Escucha el compás.

Shortstory I

Eras diáfano como el cielo de tundra bajo tus pestañas/ yo escuché la palabra paz con tu áurea cara/ mucho más fuerte que el silencio enterrador de mis raíces/ es la alegoría de la fortuna animada/ entre los cantos de un vestido que cubrió mis lágrimas desde tu nombre.

Luego la señal se perdió/ y seguimos siendo polos norte y sur/ sin saber que ya nos ha burlado el tiempo.

La venganza persiste/ mientras te proclame en la humedad de mi pared desnuda.

Exequias

Diplomacia vendió sus pieles a la ONU
le dieron exequias justas
mortificaron las televisoras con mensajes
em-papa-dos de amor y luz
en tiempos de navidades hambrientas
de un qué sé yo
que nadie comprende
porque habemus automataes
y no corazones rosas.

Me retuerzo en sus discursos débiles;
luego almuerzo incomprensión con dios.

Cuerpo sacro (no) / pagano (ni)

Luchar a lomo partido
arrancar del pentasueño
lo que no se tiene por derecho divino.

Es este núcleo de fuego parido
latiendo dentro.
Camino a contraluz
y tu silueta me parece la de un santo
aunque jamás lo hayas sido.

Tomemos una taza de viento y galletas Cronos
yo te detuve el tiempo entre mis labios
cuando me apoderé de tu nombre en secreto.

Yo te bendigo con la carne silente
por tanto mendrugo dado en mis manos.

Luchar a lomo partido...
(cuál, si ya no queda cuerpo sacro ni pagano
en toda esta tundra).

lunes, 28 de diciembre de 2009

Barquito vikingo ígneo

Despojo mi núcleo sin peso
de las armas fatigantes
del humano cotidiano.
La mano estirada al calce de un libro cósmico
mi ventana es una escafandra al sol de medianoche.

Tú estarás siempre piloteando la nave nodriza
no es una promesa de amor
es una realidad que llevo cargando muy adentro
como si fuera (como si supiera)
que es el último círculo postártico
visitando mis vestiduras de añil melancolía.

Un anillo para decir adiós
sin dejar de estar contigo.

Un barquito vikingo ígneo a la deriva
y mi nombre se hace fuego insondable
entre los surcos de las yemas de tus dedos.

Adiós

Mariposa negra abierta de piernas-alas:
desgarra este vientre intacto
mientras yo trozo tu memoria escrita de tu arena
en mi hueco llamado corazón.

Esa franja

Esa franja que ocupa nuestro lugar
hay mil egos a la distancia peleando tu nombre.
Ego, distancia, ceniza y nombre.

Nadie ha sabido explicar
hasta nuestros días
por qué la ausencia golpea hasta sacar sangre.

Ego, distancia, noticia
(fuiste) nombre.

Salí y desaté los nudos de mi garganta:
hoy es rencor, segundos para odiar
la centésima no lumínica estirpe que nos heredas.
Soy pundonor, soy el recuerdo de mi yerba seca.

El perdón es algo divino.

Su cauda no pasea entre trogloditas.

Apología de la razón pura

Estrujé las palmas de futuras manos
que no sabrían el sentido
de la magia de tus besos ocultos.

Me queda caminar directo a otro sol
menos amplio
menos eterno
con la promesa en la boca:
ha habido un derrumbe de amor
y tú sólo te quedaste dormido
en mi trayecto de la inocencia a la adultez.

Pervive en mí la razón pura
llamado espíritu de amor.

domingo, 27 de diciembre de 2009

Ananá Poético (última parte de 2009)

Abrió las cortinas:
todo era blanco impoluto.
Afuera hay girasoles
para platicar con los muertos
de la honra al sol.

Adentro hay nardos
para platicar con los muros
del amor a la mancha absurda
pero inmensamente tierna
que es Dios visto
desde los ojos del primero
que cruza la fuente con los labios o la boca
las palabras o el canto.

Lloviznando

El dolor se te clava en el ego,
dices.
Yo no.

Yo más bien lo siento en toda la luz que me comes
cuando destiendo el lecho
y abrazo el desierto que me has regalado.

Rocía mi frente y la frente de mi ego
con tus pestañas secas.

Hoy toca amanecer lloviznando
y en silencio.

Caminos de etiqueta amarilla

Caminos de etiqueta amarilla
todo está al veinte por ciento menos.

Intuyo que Mozambique
y la Selva Lacandona
platican con la Sierra Tarahumara
y los suburbios
de los niños que durmieron solos:
las medias maternas se han vuelto caladas
desde el cierre de la fábrica ulterior.

Varios hemos exterminado los anaqueles.
Sus productos no estaban etiquetados
para su venta individual
-según tratados artificiales de derechos naturales
garantías individuales conocidos como humanos
como si un extraterrestre me reconociera
algo que llevo clavado
y que es algo más que poesía-.

Hemos de surcar nuevas prendas,
surcir amor, no.

Piedra apuntando al sol

La piedra apuntando al sol
y una escarcha abortada
avisa con voz sideral
la entrada triunfante del frío en las manos.

Echaré tierra cuando el polvo sideral
se agote de mi boca.

Esta noche habrá una mentira creciente
para arrullar el milagro de renacer
bajo el augurio de tus sueños.

La piedra apuntando al sol
no es el sol quien tapa a la piedra
y no es el mundo el que regala lágrimas al portador.

Una estrofa entera y muda

Uno, dos, tres...

Diciembre es un pasillo
colador de las hojas adheridas a tu frente.

Si no hubiera una canción especial
para dedicarte
yo sería lo primero en entregar
a falta de un flautín, un piano;
un farol en las manos que queme las palabras.

Una estrofa entera y muda
al honor de tus pies en mi espacio.

Es viento y no lluvia
lo que remueve las circunstancias;
es fuego y no tierra
lo que siembra cenizas que arropan al corazón.

Y ahí estás presente.

viernes, 25 de diciembre de 2009

Peregrinaje

Aludes y un nudo de canicas rojas y blancas
-ad-hoc a las fiestas-
más las moradas
en la panza.

O en el hueco del corazón
que todos llenan
del mismo modo que es vaciado.

Una peregrinación de imágenes
desnuda mi piel interna:
hay demasiado amor esta noche
disparando saliva, salvia y besos como rayos de bicicleta.

Estarás ahí, para atestiguar
el derroche de parque en mi ciudad húmeda;
luego los relojes
nos avisarán que he sido vencida
por la inmanencia de la entrega perpetua.

domingo, 20 de diciembre de 2009

Tectónica de pieles

Bajo esta alfombra ceniza, naranja
y sin estrellas
que es este cielo
prescindo de toda forma romántica.

Lánzome a la estratósfera de tus años
y a la esperanza que es el agua de los labios
tu planeta
mi cuerpo.

Algo bueno hay a la hora de dormir
tomados de la mano.

Tectónica de pieles
le dicen los amantes.

Rojo

Un charco de sangre
llamando a destiempo
y tu figura en ciernes
respira dentro de mi cuerpo
a minutos luz
de morir entre mis castillos de arena en el aire.

sábado, 19 de diciembre de 2009

Mil motivos

Esta totalidad
mi media luna
alguna ropa desvencijada

(defragmentación pura
sensualidad de soledad amarga)

se desarma y abre la rosa
galaxia erótica a la distancia.

Habrá mil motivos para sentirte
en presente infinito
pulsante
filoso
penetrador de mi nombre.

Grafito en el ojo.



Mientras otras aves
cultivan envidia de asteroides.
La envidia corroe al hombre.

Y de tus labios mana tinta
es tinta para dos diminutas flores.

Lápiz
parker
catarina.
Hombre de fuego a mis deshoras.

La noche me llueve caricias.

Estoy aquí para contenerlas como Visnú
con la multiplicación de sus brazos.
Hoy por ti y tu espalda
mañana por tu vientre.

Resumo así
el par de besos resonando
en la finitud
de mis senos.

Hoja muerta no,
palacio de letras dactilares
entre mis labios;

anzuelo de hierro no,
gancho suturador de este túnel
de vida y luz
que soy cuando me nombras.

8/XII


Muerte.
y tus rodillas poblando a Dios
en este campo de mirtos
llamado Cielo.

Que todas las amapolas resuellen
en tus caderas:
hoy viajas
príncipe
corazón muertamente
casi azul,

a ese centro
de ahora en adelante
tu nuevo hogar
dentro de esta esfera
tintineando la palabra
Universo.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Alas

Alguna vez trenzaremos alas
las mismas que destejeré yo con mi falda a flores
mientras te miro andar por los trigales
que nunca te sembré
y aún así son todos frondosos
y siempre tuyos.

Bocacalle

No me interesa saber
quién ha estado antes de mí
o quién estará después de mi nombre.

La noche me consume.
Y no es una cualquiera,
es la madrugada de este lunes
y yo me dejo envolver
por su savia transformada en la mitad de los cromosomas
que necesito para perpetuar mi bocacalle.

Si la sustancia equilibrante

Es la textura de una tabla de cedro viejo
esta cuestión de dejarse barrer
por el infinitesimal ojo de la indiferencia.

La bolsita de papel sucia
recuerda lo humildes y exactos y venideros
que somos siempre frente al otro yo
asomado en la torpeza
de la palabra fin.

Se me acaban las palabras
algo muere dentro de mí.

Y quisiera saber si soy yo
o si la sustancia equilibrante escasea en mi sangre.

Ésa,
ésa, ¿la sientes correr?

Alguna vez le llamé amor.

domingo, 6 de diciembre de 2009

Honor

Sucedáneo del universo:
hemos comido el pan de la sucesión de nuestros cinéticos días
y ni así reparamos
en el arrepentimiento profundo,
como este hoyo que llamamos garganta,
inmenso, como el cielo que no se levantará
a verte nacer los ojos otra vez.

Yo daré cuentas al creador
cuando te hayas levantado de esa incómoda cama
y que mis manos estén limpias de las tuyas.

Le diré que fuiste guerrero y venciste a la muerte,
otro mundo allá a lo lejos
te espera para rendirte lo que siempre buscaste,
hombre de un fragmento de mi sangre:
honor.

jueves, 3 de diciembre de 2009

Invitación (salvaguardemos la galaxia)

Salvaguardemos la galaxia
engendrando flores de infinita duración.

Así mi nombre será eterno en sus pistilos
y tu poder creador será mil veces mil
en cada estambre que llegue a aparearse
con la luz del sol.

Salvaguardemos la galaxia
recordando los cielos violetas
que sembré en Saturno
el día que te conocí.

Para que nunca seas sentencia y sí verso de viento:
dispérsate por los campos de mis entelequias
mis poros y mi sociedad unipersonal
que soy aquí y siempre
esperando por tu vaho que crece yerbas
a mi alrededor.

Through all the languages, your image in me sings:

Long hair
oh blue sky in the eyes of the sea
now I know
whats the meaning
of liasion:

And it's your voice,
comming fromm the ancient Earth,
the land of your romantic flowers
and the Beatles guiding you
as the dreamer who claimed my name

Standing for my hands.

And my hands are writing your entire soul,
my great, giant love(r).

Ese holograma

Castigo y no flor:
cuántos libros y castillos de grava sucia
habrá que levantarse
para que la juventud entienda
que mil veces mejor escuchar un segundo
a tatuarse un sermón interminable
emitido por quien se cree pretor
de la verdad y la justicia.

Sin saber que ese holograma
es producto caduco:
que viva la falibilidad del sistema,
habría que gritar más seguido
lo indolente que es el espíritu
a la hora de sentarse con el señor capitalismo
y cenar a ultranza
bagajes de verdadera libertad.

Bola de billar

Yo sabía que existía este tremor de palmeras silentes
escondido en el iris negro de este mundo
que me tocó encarnar como yin sin riendas.

Nunca supe, en realidad no tuve ganas,
de entender que a este don se le llama libertad
y es demasiado difícil de consensuar
con otros parajes internos
e incluso entrelazar
la memoria de lo que no ha sido y sin embargo pienso
con la bendita maña de los otros
a tomarme como crucifijo en tiempos póstumos a la cuaresma.

Soledad le llamarían los románticos.
Creo que es amor a la causa y el efecto,
y ese estoico sentimiento de acatar
lo que la bola de billar te regala
cuando la disparas con el corazón.

Mar poluto

Prendías fuego al momento de esquiar las orquídeas
de mi cuerpo, que era tu jardín oscuro y la selvática noche de redención.

Ríndete a esta alfombra de exequias que nos conmina
a buscar otros lugares para no perder de nuestras mentes
los nombres ocupados por nuestras manos
nuestra sangre, nuestro sudor y nuestra respiración.

Detendremos los unicornios de las canciones agridulces
humilde e inmensamente melosas;
también pararemos toda incertidumbre de lo no dicho:
estamos en la dimensión crítica,
no hay momento para morir en otros espejos paralelos.

Sólo hay tiempo para gastarlo en las células que arropa
ese mar poluto de besos
que es nuestro lecho.

Las cosas más abstractas (el laberíntico sonido)

Las cosas más abstractas
se llevan dentro de este espacio medionublado
será la torpeza de un vestido en llamas azules
o quizá el laberíntico sonido que nos embruja.

Lluvia ácida, no has sido el sucedáneo del día:
son los arcos de las corbatas, esos clichés tan bonitos,
los siete rayos del firmamento constituyen figuras al olvido inmediato
habría que pensar
-si existiese tan solo un momento para tal fin-
en el finito iluminado por las voces que nos recuerdan.

Todo es colectivo imaginario
imaginario colectivo no,
yo no creo en la posibilidad de la inserción
de mi propio tiempo espacio y virtud y defectos
en este caudal absurdo
que llamamos imposición de la realidad.

martes, 1 de diciembre de 2009

Censúrame

Censúrame estos labios
y te amaré para siempre
los pies atados a mi barro que es tu espejo
las manos como pidiendo gracia al Creador.

Y la media luna que perpetúa nuestra génesis
en el punto exacto de tu fecundidad de hombre.

A labio partido,
yo te recuerdo que soy algo más que mujer,
diosa, dijeron por ahí,
desde que poseo el don del tiempo
y la libertad del ave que murió en mi jardín por amor
a mi soledad.

El nuevo dios

Me gusta ser diciembre en la nevera de este cuarto
así me mantengo joven
o al menos creo que recobro la adolescencia
que nunca fui por miedo a no sé qué.

Los cassettes ya no funcionan
las marcas de moda ni siquiera confeccionan mis ropas:
todo le pertenece al niño que es mi alumno
(y es el que me paga mis pesos cada martes
para hablarle de una sociedad en vías de extinción
-y eso qué-)...

Tampoco pongo luces,
se fueron todas por la coladera,
junto con el gorrito de la fiesta que no vimos juntos,
esa que era de nuestros niños que matamos porque nunca hubo cópula
y toda esta parafernalia que ahora detesto
porque soy más libro que mujer.

Y así estoy bien, pensándolo muy profundamente
y sin remordimiento alguno...

Fírmame al calce de este poema
y seremos libres los todos de los otros
y tal vez,
sí,
mi beso se comparta contigo
en el nuevo dios que llevo dentro.

Gamas

Aquí, junto al charco que es luz
y que es galaxia y que no somos tú
ni yo,
te pienso casi eterno.

La lluvia ha traído para mí
la mágica gama
Altagracia, le decíamos unidos
entre sueños,
del porvenir incierto y este reloj que no da marcha atrás
pero sabe los pliegues de nuestros labios
y las mariposas que no parieron
porque nacieron en este teclado
y en la frontera
del desquiciamiento humano globalizado.

No fuimos culpables, fuimos accidentes
testigos de lo que un verso no hizo en el mundo allá afuera.

Por eso nos amamos tanto.
O al menos, yo lo sentía así.

Y ya tu cara se me borra de la palma de mi mano

Pisos

Tengo un hombre atado a mis pensamientos
le llamo por sus yemas
es ángel y es soledad al mismo tiempo,
también es espía de mi cuerpo en luna llena,
como hoy
y ni siquiera me sabe cercana ni tan suya a él.

Tengo dos pisos extra para delinquir sobre este tapete
fabricar castillos de arena
-otra vez-
fugarme incierta a la primera galaxia,
Casiopea, se llamaba a mis dieciséis
Centurión de Orión, a mi cercana treintena.

Y nunca pude dejar de ser mariposa etérea
ni flor de nadie en galáctico espiral...

Tengo un nombre en el barro que me vuelve mujer y no profeta
le digo amor,
está en mis muros,
también en mis lapsos de insaciedad
estos resquicios que resbalan con la lluvia helada que es diciembre para mí.

Caballo de mar

Solía tener un caballo de mar en mi azotea
lo tenía listo para embarcar
si así fuera menester o posible hacerlo
a las riquezas de oro del corazón sin andamiaje.

No lo he visto por aquí
me temo que haya muerto,
mi caballo de mar en mi otrora azotea.

Un cristal llamado vitral llamado cortina de colores de arena refulgentes
se instaló en la bóveda de mis pensamientos.

Ahora sueño, duermo,
con la incesante magia del infortunio o del parabien
que me guarda la noche espesa de tanta lluvia.