Coloqué flores en el aire
para columpiarlas.
Si el alma feliz tiene alegoría
-si existe la felicidad,
si existe el alma,
si alguien puede apelar a las alegorías-
son sus pétalos abriéndose
y yo de risa viento su impulso.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario