También amo las flores
las que nunca me has dado
y no necesito
pues entre tu nariz y tu olvido
de hombre puro y lejano
encuentro a la orquídea y al lirio
y el paraíso me es concedido
porque venero tu florida mano.
lunes, 6 de octubre de 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario