Sr. Wall Street
llena de papeles verdes con olor a corrupción.
El ébano fino al tacto de su piel contrasta
con las noches que le traen, una a una
la tristeza, el vacío y la desazón.
Observe por su amplia ventana la ciudad
Sr. Wall Street
vea lo hermoso que es volar libre como el viento
No hay seguros de vida
ni contra accidentes ni los malos momentos
que pasa Usted cada día frente a su Contador.
Pues sabe que los billetes aumentan
y los días se le escapan, como granos de arena
que al tomarlos entre sus dedos
le recuerdan el brillo y el candor
De esos ojos gris aceituna
que de crear nueva vida la oportunidad le dieron una
y que Usted, Sr. Wall Street
puso en el frasco del olvido su fulgor.
Ábrase al vértigo de estos últimos días
Sr. Wall Street
no siempre se es Presidente de su Compañía
la misma que nunca le ha dado luz a su soledad.
Mire cómo la vida marcha
Sr. Wall Street
mire cómo ella camina desairada
pues sabe que uno de sus hijos
su corriente dejó.
Sr. Wall Street...
no le hago perder más su tiempo
Es importante no perder una sola oportunidad
de besarle los pies a Don Dinero...
Sr. Wall Street
Sr. Wall Street...
en su funeral
juro llorarle monedas de amor.
De la Serie "Retratos Hablados del Yang"
Escrito el 1 de Mayo de 2001
Escrito el 1 de Mayo de 2001
No hay comentarios:
Publicar un comentario