sábado, 5 de octubre de 2013

Ulises Noche

Terminé de trapear y la tina
acomodada está en espera de un nuevo polvo.
Estará inmóvil, mansa
como los frascos a la espera
del vacío tras el perfume
o las sábanas recién lavadas esperando
de regreso a Ulises Noche
los objetos perdidos a la espera del fin de las moléculas
para reunirse con sus dueños muertos.

El azúcar del dulce de leche
esperando otra vez septiembre

para creer en los espíritus vivos. 

Sábado

La tarde que nació viva
para que tú la vistieras
o la desnudaras
según el ritmo de tus lentes.

La tarde que caducará
tan pronto me vuelva carne vacía

por causa de los kilómetros.

La tarde que tu metodología de la microhistoria
no detectará
porque soy páramo
y tú estás en el ombligo de la Luna.